La maca peruana, conocida científicamente como Lepidium meyenii, se ha consolidado como uno de los superalimentos más populares entre los adultos mayores. Este tubérculo andino, cultivado durante siglos en los Andes peruanos, es valorado por sus propiedades revitalizantes, efectos antioxidantes y potencial impacto en la salud sexual. Investigaciones recientes señalan que su consumo puede mejorar la energía, la memoria, la fertilidad y la calidad del sueño en personas mayores de 60 años, aunque se advierte sobre la necesidad de seguir pautas de consumo responsables y evaluar posibles contraindicaciones.
Beneficios principales de la maca peruana en la tercera edad
Diversos estudios destacan que la maca puede contribuir a combatir la fatiga y el estrés, mejorando la vitalidad y la resistencia física. Su contenido de almidón, fibra y proteínas aporta nutrientes esenciales que favorecen la salud general. Los efectos antioxidantes de la maca ayudan a contrarrestar los radicales libres, implicados en enfermedades crónicas como afecciones cardiovasculares, diabetes y ciertos tipos de cáncer.
En el mismo sentido, diversos estudios han demostrado su capacidad para respaldar el bienestar sexual. Un régimen diario de maca gelatinizada durante ocho semanas evidenció un incremento en la libido, sin detectar alteraciones importantes en las concentraciones hormonales de testosterona o estradiol. Adicionalmente, investigaciones sobre fertilidad han destacado avances en la calidad del semen, como el incremento de la motilidad y el conteo de espermatozoides tanto en hombres con infertilidad como en participantes saludables.
Además de los efectos físicos, la maca peruana podría favorecer la función cognitiva y la memoria, ayudando a mantener la actividad mental en la tercera edad. Su capacidad para mejorar la calidad del sueño y reducir la sensación de cansancio convierte a este superalimento en un aliado para quienes buscan mantener un estilo de vida activo y saludable.
Efectos en el sistema hormonal y características antioxidantes
La maca tiene componentes vitales como el yodo y el zinc, que apoyan la actividad del sistema endocrino y refuerzan el sistema inmune. Actuando como un adaptógeno, facilita el ajuste del organismo al estrés y eleva la energía. Sus características antioxidantes resguardan a las células del daño oxidativo, resultando valiosas para la prevención de enfermedades ligadas al envejecimiento.
Dosis recomendadas y precauciones para adultos mayores
De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, el consumo sugerido de maca para adultos varía entre 1.5 y 3.5 gramos por día, durante un lapso de seis a dieciséis semanas. Se recomienda hablar con un especialista en salud antes de comenzar a tomarla, especialmente para personas con condiciones médicas particulares.
La maca generalmente no causa efectos secundarios importantes, pero se recomienda evitar su consumo en mujeres en gestación o que estén amamantando, así como en individuos con presión arterial alta o sensibles a las hormonas, como quienes padecen cáncer de mama, útero u ovarios, endometriosis o fibromas. Además, ingerirla antes de acostarse podría causar dificultad para dormir por su efecto estimulante.
Métodos sugeridos de consumo
La maca peruana se puede incluir en la rutina alimenticia de forma natural, ya sea cocida o incorporada a sopas, guisos y caldos. Igualmente, se encuentra en cápsulas de extracto, pero se sugiere consumirla principalmente por la mañana o al mediodía para beneficiarse de sus efectos energizantes y prevenir problemas de sueño.
La maca peruana representa un complemento natural para la salud de los adultos mayores, aportando beneficios físicos, cognitivos y sexuales, siempre que se respete la dosis recomendada y se consideren posibles contraindicaciones.